Hola, soy Amanda.

FRAGMENTOS 
DE EL LABERINTO EN ESPIRAL

Al fondo de la habitación, se iluminó de forma progresiva una puerta. La joven se acercó y giró muy despacio el pomo. Tras ella distinguió una sucesión de portales que parecía no tener fin.

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—Adiós, Alice… Eres el Heraldo de los Tiempos, la elegida. Aquella que despertará a la Madre de su sueño ancestral. Adiós…
Las voces se desvanecieron poco a poco mientras Alice entraba con Mágos en un corredor, en el interior del árbol.

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A través de la pequeña abertura en la roca contempló lo que se ocultaba al otro lado. Allí se levantaba una ciudad que parecía producto de un espejismo.

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Aquellas vidas pasadas, presentes y futuras, tal y como Khaled las percibió, pertenecían a un no-tiempo, que las unificaba a todas. Un eco polifónico, en el que lo que fueron, eran y serían avanzaba sin cesar, atravesando los universos. Era esencial que vislumbraran el verdadero valor de toda existencia, por pequeña o fugaz que esta fuera.